Bésame tesoro

Hay quien no conoce los colores. Hay quien no conoce los olores. Hay quien no conoce los sonidos. Hay quien no ha visto jamás. Pero su gran día llegará. Muchas cosas no las hemos percibido aún, viviendo en la ignorancia. Pero nuestro gran día también llegará. Vivir solo es una parte del existir, hay tanto y queda tanto que descubrir... Me acurruco en tu pelo como perrillo lastimero, te miro sin verte y pienso en lo mucho que te quiero. ¡El sol ya se oculto! ¡Y la noche sin ti se hace larga y sin una pizca de gracia! A oscuras mirándote a los ojos, embriagado de tus aromas y olores, me conformo con ser yo. De madrugada las sabanas frías y alteradas, me he vuelto a perder como te marchabas. Sueño con tu almendra tapándome media escena y esos pelillos flotanderos que no se ponen de acuerdo. Recuerdo cuando todo esto era imposible y aún no lo podía echar de menos. Tu luz y mi tranquilidad, tu alegría y mi seriedad, tu cuerpo y esta mano, explorando y abarcando. A tu lado hasta la peli más mala gana encanto. A tu lado el plan más cutre se convierte en extraordinario. A mi lado no te quiero aburrir, cierro los ojos en calma y vivo ese sentir. En calma, con sonido de fondo toda mi atención acaparas. Casi a oscuras, te abrazo tan fuerte que me tengo que reprimir. A oscuras el brillo de tu voz alcanza el de tu mirada cansada. Me gusta verte calmada y relajada, estirada y acomodada. Tan suave como esa camiseta clásica, vieja y holgada que te pones para estar relajada. Relajados, sin temer el uno del otro, como si fuésemos dueños y amos del tiempo. A tu vera piernas suaves y largas, te comería con las manos pero guardo silencio y apenas me muevo. Nuestras narices hacen buena pareja, no te cortes y bésame por ultima vez esta noche. Solo quiero que seas tu misma, cuando llegas de currar agotada. Yo me encargo de tus caprichos. Entre estos fuertes brazos tú eres la ama y dama. Tú el refrescante y limpio rocío, yo la planta más feliz de tu jardín. Tú el sabroso chocolate y yo la deliciosa nata, en un lecho de bizcocho con toque espirituoso. Bésame tesoro, que se grabe a fuego nuestro recuerdo.